Alabama se une a Texas en su demanda ante la Corte Suprema por irregularidades “inconstitucionales” en las elecciones. El estado de Texas demandó a Georgia, Míchigan, Pensilvania y Wisconsin, acusándolos de efectuar cambios inconstitucionales en las leyes electorales este año, explotando la pandemia.
El fiscal general Steve Marshall, del estado de Alabama, ha apoyado la moción de Texas, que desafió los resultados de las elecciones presidenciales en La Corte Suprema de EE.UU. El Fiscal denunció en un comunicado este martes que las “acciones inconstitucionales y los votos fraudulentos a favor de Joe Biden en otros estados no solo afectan a los ciudadanos de esos estados, sino que afectan a los ciudadanos de todos los estados”.
“Cada voto ilegal contado a favor de Biden, o voto legal no contado a favor de Trump, degrada y diluye el libre ejercicio de la votación por parte de los ciudadanos”, señaló el fiscal general de Alabama, quien ahora espera la decisión de la Corte acerca de la demanda de Texas para deliberar sobre el proceder de su propio estado en su “lucha por garantizar la integridad de las elecciones”.
🚨La demanda de Texas contra Pensilvania, Georgia, Michigan y Wisconsin se presenta directamente ante la CORTE SUPREMA. pic.twitter.com/cZmyz9kTXW
— Marcial Cuquerella 🤙 (@cuquemar) December 8, 2020
El propio fiscal general Steve Marshall, no firmó la moción presentada por su homólogo de Texas, Ken Paxton, quien demandó a Georgia, Míchigan, Pensilvania y Wisconsin, acusándolos de aprovecharse y explotar la pandemia de covid-19 “para justificar la omisión de leyes electorales federales y estatales y la aprobación ilegal de cambios de último minuto, alterando así los resultados de las elecciones generales a favor de Joe Biden que todavia es candidato a la presidencia todavia y no electo por el colegio electoral del 2020”.
Paxton afirmó que estos cambios permitieron que ocurriera el fraude electoral, una conclusión que los expertos y los funcionarios electorales han rechazado, y dijo que la corte debería retrasar la fecha límite del 14 de diciembre en la que los estados deben nombrar a sus electores presidenciales.
“Sin embargo, esa fecha límite no debería cimentar un resultado electoral potencialmente ilegítimo en medio de esta tormenta”, escribieron los fiscales de Texas.
Los funcionarios en Georgia, donde el secretario de Estado Brad Raffensperger recertificó los resultados electorales del estado nuevamente el lunes después de un recuento, se apresuraron a desestimar las acusaciones de Paxton, al igual que los líderes de los otros tres estados mencionados en la demanda.
“Las acusaciones en la demanda son falsas e irresponsables”, dijo el martes el subsecretario de Estado de Georgia, Jordan Fuchs, en un comunicado. “Texas alega que hay 80 mil firmas falsificadas en las papeletas de voto ausente en Georgia, pero no presentan a una sola persona a la que le sucedió esto. Eso es porque no sucedió”.
La procuradora general de Michigan, Dana Nessel, desestimó la demanda de Paxton al calificarla como “un truco publicitario, no un alegato legal serio”.
“Las acciones del señor Paxton están por debajo de la dignidad de la oficina del Fiscal General y de la gente del gran estado de Texas”, dijo.
Paxton y Trump son aliados políticos cuyos intereses a menudo se alinean en los tribunales, como ocurre con el desafío de Texas a la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (Obamacare). Paxton, en apariciones públicas, a menudo caracteriza su relación como amistosa, compartiendo la historia del momento en que el presidente llamó mientras Paxton estaba en la ducha.
Paxton, quien ha sido acusado desde 2015 por delitos graves de fraude de valores, enfrenta nuevas acusaciones penales de ocho de sus principales agentes, quienes dijeron que creen que violó la ley al usar la agencia para hacer favores a un donante político. El FBI está investigando a Paxton por esas afirmaciones, según Associated Press. Paxton ha negado las irregularidades.